Bodegas Campos Reales completa su viaje de participación en la estrategia de promoción en Europa, tras su visita a Praga
Como parte de su estrategia de promoción en Europa, IPEX lleva los Vinos de Castilla-La Mancha a Praga, donde el público checo pudo conocer tanto los productos tradicionales de la región como las novedades que ganan cada vez más relevancia. Un total de 14 bodegas de la región de Castilla-La Mancha presentaron sus productos en la capital de la República Checa, buscando atraer aún más al público a través de su gran variedad de uvas autorizadas, unas 30 referencias en total, procedentes del mayor viñedo del mundo: la región de Castilla-La Mancha.
Tras su paso por Copenhague, Lorena Martínez, Sales Manager Europa y España de Bodegas Campos Reales, presentó los vinos de la bodega conquense a importadores y distribuidores. Este programa desarrollado desde 2015, ha llegado a Países Bajos, Austria, Alemania, Bélgica, Polonia y Reino Unido, permitiendo la presencia física tanto de importadores como de bodegas invitadas.
Luis Quintín Villamayor, del Instituto de Promoción Exterior de Castilla-La Mancha, comentó a Radio Praga Internacional, el recorrido tan prometedor en cuanto a exportación vinícola que supone Chequia: “Desde el año 2010, hemos venido notando un incremento muy importante de la presencia de vinos españoles y de vinos de Castilla-La Mancha en este mercado y consideramos que todavía queda mucho trabajo por hacer. Hemos detectado que los consumidores checos aman el vino y creemos que el vino español es un vino que puede encajar muy bien en este país. Creemos que es muy complementario con los vinos locales que se producen aquí que son, realmente, interesantes”.
IPEX lleva los Vinos de Castilla-La Mancha a Copenhague y Praga como parte de su estrategia de promoción en Europa
Desde 2015, este programa ha abarcado países como Bélgica, Reino Unido, Polonia, Austria, Alemania y Países Bajos. La actividad programada consiste en presentaciones de vinos de Castilla-La Mancha a importadores y distribuidores en Copenhague y Praga. Estos eventos se realizarán en salas de hoteles o centros de reuniones, permitiendo la presencia física tanto de importadores como de bodegas invitadas.
El mercado del vino en Chequia ha mostrado un notorio crecimiento, impulsado por el desarrollo no solo de este mercado en sí, sino también de mercados vecinos que, a pesar de su tamaño reducido, exhiben un gran potencial. Esta tendencia positiva se acompaña de un cambio hacia gustos más sofisticados por parte de los consumidores. Asimismo, en Dinamarca, el sector del vino ha mantenido cifras positivas en la importación de vino español en los últimos cinco años, brindando estabilidad al negocio vinícola en este país.